El Pinot Noir

Chardonnay

El Pinot Noir es una variedad emblemática de Borgoña, con raíces profundamente arraigadas en el norte de Francia. Produce excelentes vinos tintos que han contribuido a la promoción de la región de Borgoña en el mundo entero.
Los racimos del Pinot Noir, pequeños y compactos, nos recuerdan la piña de la que toma su nombre. Este vino fino, liviano con aromas sutiles, se viste de una capa clara y luminosa. Su amplia gama aromática refleja toda la riqueza de su terruño: ofrece aromas jóvenes de frutos del bosque frescos (grosella negra, cereza...) y de especias (pimienta, canela), así como notas animales (cuero, piel) y de sotobosque (setas, trufas) más maduras.
Este vino de taninos suaves y cincelados seduce el paladar sin invadir. El Pinot Noir ofrece el equilibrio perfecto entre fuerza y delicadeza. Vivo y delicado, se marida maravillosamente con platos de pescados refinados.
No es de sorprender que el Pinot Noir se desarrolle tan bien en Borgoña: el clima local proporciona las condiciones ideales para el cultivo de esta variedad de ciclo vegetativo tardío y largo. Se armoniza perfectamente con su terruño sublimando sus cualidades.

Las diferentes expresiones del Pinot Noir

Chardonnay

Su desarrollo está estrechamente relacionado a la historia de los hombres: los romanos domesticaron las vides silvestres; se han encontrado indicios de esbozos de viñedo borgoñón y champañés de los monjes cluniacenses en la Edad Media, y los cuatro últimos duques de Borgoña contribuyeron al esplendor del Pinot Noir.
A partir del siglo XV, el Pinot Noir obtiene nuevas expresiones en el terruño de regiones con influencia germánica. Alemania, Suiza, Austria, Alsacia, Rumanía, Bélgica... En Alemania se prefiere un Pinot Noir ligero y que se bebe fácilmente, con notas sutiles de frutos del bosque y especias que encuentra un equilibrio perfecto entre dulzura y buena acidez. Cabe añadir que fue la emigración germánica que favoreció la difusión del Pinot Noir en los nuevos países vitícolas como Australia y Estados Unidos.

Créditos de las fotos: BIVB